Jengibre

El jengibre o kión nos ayuda a crear tonalidades castañas en el cabello. Y en el proceso de lograrlo, proporciona muchísimos aceites esenciales, vitaminas, aminoácidos y minerales. Gracias a ellos, fortalecemos el cabello, combatimos la caída y aliviamos la irritación del cuero cabelludo.  Por si fuera poco, su olor cítrico hace del proceso de teñirse una experiencia relajante y terapéutica. ¡Te la mereces!

En un tinte químico los tonos castaños se logran con la combinación de resorcinol, amoniaco, perióxido de hidrógeno y PPD. Estos tóxicos generan quemaduras y cicatrices en el cuero cabelludo, debilitamiento de la hebra capilar y caída del cabello, resequedad, entre otros. No solo perjudican nuestras cabelleras si no que son venenosos para los demás órganos de nuestro cuerpo ¿Te arden los ojos mientras te aplican un tinte? Ellos son los responsables. El jengibre nos permite eliminarlos de nuestra lista de ingredientes para lograr, junto con las demás plantas, un tinte 100% natural, orgánico y vegano.